El camino de un chef se forja entre recuerdos, aprendizajes y sacrificios. En el caso del chef Cristian Gómez, su historia comenzó en la cocina de su hogar, donde sin imaginarlo encontró la chispa que marcaría su vida profesional.

“Mi pasión por la cocina comenzó desde pequeño ya que en casa mi madre todos los fines de semana se cocinaba para toda la familia y tenía que ayudarla, al principio cabe resaltar que no me gustaba y que lo hacía más porque no me regañara, pero poco a poco, el ir conociendo los ingredientes, las mezclas, los sabores, el ir a comprar la carne, ver cómo hacía las tortillas, el mole, tamales etc., me fue gustando y atrapando y fue en la secundaria cuando decidí que de grande quería ser chef”, recuerda.

Con esta decisión clara desde joven, Cristian nunca abandonó su sueño hasta que finalmente logró estudiar gastronomía, lo que dio inicio a una trayectoria llena de esfuerzo, retos y satisfacciones.

Una carrera forjada a base de esfuerzo

Cristian comenzó a trabajar desde muy temprana edad. “Mi experiencia en el mundo laboral ha sido muy gratificante pero también muy exigente y pesada, comencé a trabajar desde los 14 años en una paletería, después de mesero en varios restaurantes en la ciudad de Toluca, para después irme a hacer prácticas en un hotel en Los Cabos”, relata.

Su formación lo llevó a la Ciudad de México, donde descubrió su verdadera pasión: la repostería. Ahí trabajó en reconocidos restaurantes como Nudo Negro del chef Daniel Osadía y Sepia Cucina Italiana del chef Julián Martínez. “Lo que me voló la mente en su momento fue quedar en la empresa de Turin como técnico chocolate y saber que había sido seleccionado entre 8-10 candidatos en diferentes etapas y que al final del día, mis conocimientos y técnicas estaban rindiendo frutos”.

Tras esa experiencia, Cristian emprendió un nuevo camino. Primero con un socio en el restaurante Comal de Barro, y posteriormente de manera independiente con Dulce Gloria Repostería Fina. “Después de 3 años ha sido la mejor decisión que he tomado y que al final del día, TODO es aprendizaje”, asegura.

La inspiración de Cristian viene de grandes referentes en el mundo de la repostería. “Un gran repostero en el cual siempre he tenido enfoque y que me ha ayudado a ser mejor cada día ha sido el chef Amaury Guichon, su técnica, su enfoque, su estilo, sus preparaciones, su liderazgo ha sido fundamental en mi formación y sé que algún día podré tomar clases con él”.

Más allá de la técnica, Cristian se enfoca en el valor del esfuerzo diario. “Lo que más resalto de todo esto, más que una anécdota, es el valor que se obtiene de todo el sacrificio que se pone a las cosas que haces día a día, el ver el pasado y saber que has hecho las cosas bien por todo lo que has crecido y avanzado, para mí cada día es un nuevo reto y trato de que sea lo mejor y qué más que haciendo lo que más me gusta: café y postres”.

Su forma de enfrentar los retos también refleja su madurez profesional:
“El no tomarme todo personal o que todo me pasa a mí, simplemente digo… las cosas pasaron por algo y sé que algo mejor vendrá”.

La repostería como arte y experiencia

Si algo define al chef Cristian Gómez es su amor por la repostería. “Mi parte favorita es la repostería, y algo que me gusta hacer mucho son postres y pasteles, creo que un buen pastel no solo tiene que ser muy bonito por fuera y malo por dentro, todo tiene que ser un equilibrio, bonito por fuera y por dentro excelente”.

Crítico del enfoque meramente estético que domina las redes sociales, Cristian busca que cada bocado sea memorable:
“Hoy en día solo te venden lo aesthetic para redes sociales pero en sabor te salen debiendo y al menos yo, prefiero enfocarme primero en el sabor y que cuando lo prueben, tengan la mejor experiencia”.

Café y postres: la combinación perfecta

Más allá de los pasteles y el chocolate, Cristian encuentra en el café un universo que lo inspira. “El boom que está teniendo el café en la actualidad es bastante bueno y sobre todo una gran oportunidad para crecer y aprender día a día. Fusionar café y postres es mi parte favorita”.

El chef Cristian Gómez es ejemplo de disciplina, aprendizaje constante y pasión por el arte dulce. Desde los días en que ayudaba a su madre en la cocina hasta dirigir su propia repostería, ha demostrado que los sueños se construyen paso a paso, con sacrificio y pasión por lo que se hace.

Por parte del equipo de Cuisinart México, agradecemos al chef Cristian Gómez por abrirnos las puertas de su historia y su pasión por la repostería y el café. Estamos muy emocionados de compartir Expo Café 2025 con este increíble chef… ¡No te lo pierdas!